El rey Carlos tiene cáncer y ha iniciado tratamiento. El impactante anuncio, que dejó helados a los ingleses, se produjo en una nota difundida anoche por el Palacio de Buckingham, pocos días después de la hospitalización del monarca por una operación de próstata.
El Palacio de Buckingham no ha revelado qué tipo de cáncer tiene, pero ha descartado un cáncer de próstata.
“Durante la reciente cirugía hospitalaria del Rey por un agrandamiento benigno de la próstata, surgió otro tema de preocupación. Las pruebas diagnósticas posteriores han identificado una forma de cáncer”, se lee en el comunicado de prensa, que continúa: “Su Majestad inició hoy un programa de tratamiento regular, durante el cual los médicos le aconsejaron posponer sus compromisos públicos. Durante este período, Su Majestad continuará ocupándose de los asuntos estatales y del papeleo oficial como de costumbre”.
La nota continúa, especificando que:
“Su Majestad ha decidido compartir su diagnóstico para evitar especulaciones y con la esperanza de que ayude a la comprensión pública de aquellos en todo el mundo afectados por el cáncer”.
Por lo que se sabe, el soberano pasó la noche en su casa de Londres, tras iniciar un tratamiento ambulatorio por el cáncer que le afectaba.
Carlos III, ¿a cuánto asciende su patrimonio?
A veces criticado, el rey Carlos III, convence a la mayoría de sus súbditos. Una encuesta realizada el pasado mes de septiembre por el Times, un año después de su coronación, explicaba que al 60% de los ingleses les gusta Carlos, mientras que sólo el 17% cree que cumple mal con su deber.
La revista entonces llamó King Charles plus trabajador obsesivo de la reina Isabel en su primer año en el trono: 161 días dedicados a compromisos oficiales, cuatro menos que los de su madre recién coronada y cumpliendo 25 años en 1952.
En el frente del riqueza personal, Carlos III, según estimaciones del periódico inglés The Guardian, que ha puesto bajo escrutinio los bienes del rey, que van desde fincas hasta coches de carreras y joyas, ascenderían a unos 2,3 mil millones de dólares.
Entre sus posesiones más preciadas cuando murió la reina Isabel II había algo intangible: la exención de Carlos del impuesto a la herencia del Reino Unido, que de otro modo habría afectado el 40% de su riqueza hereditaria.
Según estimaciones de Forbes, estamos hablando de 500 millones de dólares, que incluyen propiedades en el Castillo de Balmoral en Escocia y Sandringham House en Inglaterra, además de obras de arte, joyas, inversiones e inmuebles.
Recordemos, a este respecto, que la mayor parte de los ingresos de la realeza inglesa proceden de los ducados. Hay dos en particular: el Ducado de Lancaster y el Ducado de Cornualles. Tradicionalmente, el monarca reinante se encarga del primero, mientras que el heredero al trono, por tanto Guillermo, se encarga del segundo.
El rey también informa finca de la corona, cartera financiera propiedad de la Corona británica: el monarca no puede vender sus activos, dado que es una institución independiente de la familia real, pero la corona recauda el 12% de los beneficios anuales (frente al 25% anterior), a través de Hacienda, para financiar los gastos de la Casa Real.